El herror de Dunwich (2012)

no veo que con solo esos elementos haya que descartar que era una profunda. Que los padres negasen la adopción no me parece una razón de peso, ¡que vas a esperar de unos progenitores que se han negado sistemáticamente a llevarla al mar y que no pagaron la salida a Port Aventura del insti! No finalizar la metamorfosis a la primera.... pues puede ser mulata o cuarterona de profundo y requerir de varios intentos. Dices que lo de que colocar las piedras es un indicio... ¡me parece que eso es metaliteratura! (o tu conocimiento privilegiado de los recovecos mentales de Entro). A mi entender, ese es un indicio únicamente porque refuerza el tono de humor negro. Le doy la vuelta al razonamiento: como el volumen es de los Mitos, se supone que los profundos existen y lo que refuerza la narración es que ella sea una profunda ya que cumple los requisitos. Lo contrario sería como si un militante de la lucha contra las seudociencias, cuando lee ´La voz de la razón", ya que en la escena final no se describe a los ghules, defendiese que han aparecido unos pandilleros o media docena de ratas a las cuales el alocado prota considera ghules

para mí la prota es una profunda. Si era humana, exijo una noticia en el periódico hablando del descubrimiento de su cadáver y de las investigaciones policiales para hallar a sus asesinos

El intríngulis del relato es si será o no una profunda, por lo menos al comienzo; tal y como yo lo leo. Pero una vez avanza y los dos protagonistas la creen, importa poco que sea o no una profunda, pues para ellos lo es y para el lector también.

El giro final, cuando la chica vuelve sin haber conseguido el "cambio" y le meten las piedras en la bolsa, es lo que importa. Ahí, tal y como comenta Buscaglia, el lector elige su final; aunque los personajes eligen que no es una profunda y han cometido una "errata".

El final deja una línea invisible del trayecto hacia dónde se puede encaminar y, para mí como lector, es lo que se disfruta.

Lo de darle vueltas a si la chica ha podido ver el mar o no, es lo que el escritor quiera. Está claro que no es imposible que una chica de 18 años en una ciudad alejada de la costa no haya visto el mar, si además tanto su familia como ella no andan bien de la cabeza.

Yo conozco muchos casos en Sevilla de adolescentes que no han visitado la playa y no es solo por el hecho de ser una familia pobre, si no que uno de los padres no está bien de salud y eso impide un desplazamiento. Hay muchas razones que apoyan ese punto de la trama y no me lo hacen extraño.

Sobre el tema de si hay alguna pista sobre si la chica es humana... diré que es lo normal. Osea, ya sé que es un relato sobre los Mitos y que también es normal que sea profunda, pero para los protagonistas lo normal es que sea una persona humana. La frase final donde dice que han cometido una errata, desvela el final que para mí es el más gracioso y original; pues se trataría de un relato de los Mitos ajeno a los Mitos. No un simple relato gracioso de los Mitos. Va más allá pues juega con el lector instruido en el tema y devuelve un reflejo dibujado en los protagonista: ¿Creerías tú a alguien que dice ser un Profundo?