Unos retos estupendos estos que proponéis.
Al margen de ellos, continuo planteando mi reto inicial de re-jugar una partida ya jugada, aceptando la propuesta de partida de lesser_evil de La Casa Corbitt.
Por cierto, he encontrado un fantástico documento .pdf de Roleros Unidos, con varias Casas Corbitt planteadas en diferentes ambientaciones por distintos masteres y para variados sistemas de juego.
Roleros Unidos: Las Mil y Una Casas Corbitt
No es el planteamiento inicial, pero lo dejo aquí porque parece algo en la misma línea que este reto.
Me alegra comprobar que la estrategía de dotar de un halo científico al evento para engatusar incautos está dando su fruto.
De todas maneras daos cuenta de que no soy más que uno de esos tipos que mira con ojos de loco mientras sujeta un trepanador de cráneos en la mano asegurando que todo va a ir bien escudado bajo su blanca y creíble bata de cinco dólares.
Vaya, que si os parece comenzamos con un planteamiento sencillo tipo Casa Corbitt y un puñado de voluntarios a ver que resulta, y ampliamos en sucesivas tandas el alcance del experimento. :D
Lo que si que es irrenunciable es el punto de darle un nombre creíble al asunto, tipo "el experimento Fassbindergarner" o "la prueba Oestergruenewald".
Y mientras tanto... ¡Ya tenemos dos participantes!
...excelente...
Esto es evidentemente un montaje. No hay dos templarios que lleven el mismo uniforme. United Colors of Benetton ha vuelto a conseguirlo.
¿Que tienes demasiado tiempo libre? 
No. Que va. Si es en el fondo por el ahorro de tener que preparar partidas nuevas :P
No lo comentes.
Excelente, señor lesser_evil. Su propuesta parece de lo más razonable.
Aún disponemos de varios roles que puede usted desempeñar con su participación en el experimento:
1) Árbitro/Guardian/Master/Director. Manejará el cotarro.
2) Jugador. Hará como que no, pero luego resulta que si.
3) Sujeto de Control. Como en todo experimento necesitamos alguno. Quedaremos con él para jugar un día raro a una hora intempestiva, y luego nadie aparecerá y lo tendremos allí esperando, porque la partida ya se habrá jugado hace días y todos nos reiremos. Unos más. Otro menos.
Puede darle sus datos directamente a mi secretaria Mindy.
AZ abandona la sala, se escuchan en el exterior ruidos de cremalleras y velcros, y al cabo de un momento aparece Mindy, una hermosísima mujer vestida de enfermera con un extraño parecido al doctor, que pone morritos mientras sujeta una carpeta y una pluma aguardando la respuesta del sujeto A.
No se si será mi monitor, pero ¡yo hay momentos del vídeo que no veo na! :P
Un claro ejemplo de por qué en el cine simulan la oscuridad tintando de azul una escena con luz. 
¡Descaballemos, cabelleros!
Confiesanos, lesser_evil pillin, que no te gustaría volver a jugar la partida de "The Real MacCoy" sabiendo lo que sabes... ;)
O imagínate volver a jugar una partida como "Despertados" de ThreeFourteenGames (¿he oido "pole"?) y averiguar a donde nos puede llevar algo así.
Es cierto que estos son un tipo de partida con un aspecto especial que las hace diferentes (no quiero reventar nada, aunque el asesino es el mayordomo), pero es precisamente eso que las distingue (y por lo que a priori parece más facil el que se resientan por ser re-jugadas) lo que hace a su vez que apetezca volver a probar a ver "que pasaría si..."
Y al final, como bien sugiere Anakleto, el rol es un continuo "que pasaría si..." en el que cada grupo juega una misma aventura de formas tan diferentes que pueden incluso parecer aventuras distintas. Los audios de las partidas de "Despertados" que circulan por la red son un claro ejemplo.
Y pensemos además en los "que pasaría si..." debidos a las tiradas que ahora fallaremos en lugar de acertar y viceversa. O los "que pasaría si..." resultado de jugarlas con personajes totalmente diferentes. Y qué decir de los "que pasaría si..." del master, que también es de Dios y que quiere cambiar cosillas para divertirse como una más, y que al final es básicamente lo que hacemos todos cuando dirigimos un módulo ajeno.
A lo largo de los años, me ha pasado a veces que he tenido la sensación de jugar una partida que ya había jugado, cuando en realidad era una partida nueva (no todas las sesiones pueden ser geniales). La propuesta aquí es ¡Hagámoslo adrede a ver que pasa! :D
Por supuesto que seguramente sea más divertido jugar una partida que nunca hemos jugado (sólo "seguramente" hasta que se demuestre lo contrario empíricamente), pero si la alternativa es no jugar porque nadie tiene preparada una partida en ese momento en que ha surgido la oportunidad, tal vez aportar datos a este experimento jugando algo así no sea la opción más descabellada.
No digo que tenga que salir bien. Para algo esto es un experimento/reto. Pero creo que tenemos la obligación moral de probar esto para que las futuras generaciones de roleros no se vean obligados a hacerlo ellos mismos. De verdad, caballeros. Pensemos en el futuro.
PD: La capa mágica de tu powergamer mola :P
PPD: ¡Gracias por vuestros aportes!
Abro este hilo porque tengo un desafío que plantear, y amén de que no he encontrado otro sitio mejor en que ponerlo, quizás esto ayude a que más gente se anime a plantear su propio desafío con esas ideas descabelladas que seguro todos tenemos dentro y no dejamos salir.
Ejemplos ya los ha habido, como esa partida creada ex profeso para la habilidad de Conducir Maquinaria Pesada.
Mi desafío:
En La Tertuliona de Detrás que podréis escuchar en el audio de Las Máscaras de Nyarlathotep - Sesión #0, tras la partida, charlamos muy someramente sobre las diferencias entre Misterio y Suspense.
El misterio se da cuando el espectador desconoce qué es lo que está pasando, y va conociendolo y sorprendiéndose con las pistas que van surgiendo.
El suspense, se da cuando el espectador conoce cosas que los personajes de la historia no conocen, y la tensión se masca haciendo que el primero esté inquieto en su sillón esperando ver cómo los segundos resuelven el inevitable conflicto que aún no saben que se les viene encima.
Me permito recomendar este enlace, ya que la Wikipedia es más lista que yo.
Esto aplicado al rol, tendría que ver con la clásica división entre la información que conocen los jugadores y la que conocen sus personajes.
Pero ¿Y si lo llevamos al extremo jugando una partida que ya todos han jugado o han escuchado jugar a otro grupo?
Aquí pues está mi reto:
Busco árbitro y jugadores para jugar una partida que ya todos conozcan, para rejugarla y ver cuales son los resultados.
¿Qué conclusiones podremos sacar? ¿El hecho de que los guardianes dirijan varias veces la misma aventura y se lo pasen bien será extrapolable a los jugadores? ¿Incitará al powergaming, o por el contrario a buscar con alegría un final para el personaje que se sabe grotesco y aterrador? ¿Serán efectivamente tan decisivos para la diversión esos elementos de misterio que arruinaremos con el suspense? ¿Habrá tal y como parece a priori historias que soporten mejor un enfoque que otro?
Solo hay una forma de averiguar la respuesta a estas preguntas. Tranquilícense. Somos científicos. Estamos seguros de que no será un proceso doloroso. No demasiado.
Ayer jugamos la partida #0 de "Las Mascaras de Nyarlathotep: Edición Legendoide".
Esta primera sesión introductoria ha sido una lección de mastereo y originalidad en el planteamiento por parte de Tillinghast, de la que he aprendido mucho y de la que seguro extraeré ideas para utilizar cuando dirija (lo que los artistas llaman inspirarse, y que la gente normal llamamos atracar).
En contra del axioma de que "El Oneshot online es una Leyenda (.net)", el guardián nos propuso solucionar cuatro en una sola sesión, introduciendo en cada uno de ellos a uno de los personajes principales que comenzarán la campaña en la futura partida #1, y en donde el resto de jugadores interpretábamos prescindibles pero igualmente divertidos secundarios, en misiones en las que se nos han prometido recompensas para el desarrollo de la aventura posterior. El pobre master no se da cuenta de que no hay mayor recompensa que el haberlas podido jugar.
Miniaventuras magistralmente enlazadas, y cortadas en el momento justo, con tiempos perfectamente controlados. Aparición estelar que no desvelaré para no arruinar la sorpresa. Una extenuante sesión con unos infatigables compañeros con los que siempre es un placer compartir el tiempo libre. Y por supuesto, La Tertuliona de Detrás que esperamos dejar intacta en el audio que publiquemos para deleite de los que no tengan otra cosa que hacer que oírnos divagar.
Todo esto y mucho más podrán disfrutarlo cuando subamos el audio de la primera sesión. Mientras tanto sólo una cosa:
¡Chapó!