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Fue deseo de Lovecraft, es una cita bíblica si no recuerdo mal: "Yo soy la providencia".
Saludos,
Entro
Con independencia de que tenga un doble sentido, y de que aluda también a una cita bíblica, la referencia parece hecha a la ciudad de Providence, a la que tanto ha echado de menos mientras ha estado en Nueva York:
“my local affections are not personal, but topographical and architectural... Providence is part of me— I am Providence” (Letter to Lillian D. Clark, 29 March 1926).
"I am Providence, and Providence is myself—together, indissolubly as one, we stand thro' the ages; a fixt monument set aeternally in the shadow of Durfee's ice-clad peak!" (Letter to James F. Morton, 16 May 1926).
Y descubro ahora, a raiz de tu comentario Entro, que el epitafio es posterior (aunque quizá dejara expresada su voluntad en tal sentido antes de morir, algo que ignoro...): "Epitaph on his headstone,.. Originally Lovecraft was buried without his own separate grave marker, his name simply carved into the family's obelisk, but in 1977 a network of fans paid to add this headstone."
Fuente: wikiquote.
En realidad él quería poner "Adoro los gatitos" en su epitafio, pero alguien le jodió el invento, ¿Derleth?
Seguro que fue Derleth,... tiene pinta de ser de esos que se apropian de la voluntad de los que ya no pueden replicar. Me imagino una idea para una aventura en esta línea... Derleth, PNJ, muere al final, claro.
Yo creo que participaré con el Dia de la Bestia.
Yo siempre había creído que se refería a la localidad (aunque la verdad, no tenía ni idea del motivo). Sería interesante contrastar la referencia que sugiere Entro; acaso no tendría su puntito que así fuera, y que el autor se despidiera con un epitafio de lectura doble, o quizás triple, tratándose del padre de una cosmogonía. Ahora hasta me he liado .
En cualquier caso todo lo precedente era relleno para poder fardar con un mínimo de excusa de que un servidor fue a visitar al maestro, llegó al cementerio cuando ya habían cerrado y tuvo que superar una tirada Hard de Persuade, con la posterior sorpresa de que el guardia de turno era un fan de Lovecraft y nos dejó entrar destranquis. De hecho nos llevó en su coche hasta el sitio, que estaba un pelín lejos. También tuvimos el sustito de que el hombre, al que apenas entendíamos, empezó a hablar de escopetas con un humor bastante inquietante, hasta que entendimos que nos invitaba a sentarnos en el asiento de copiloto, al que los americanos al parecer llaman "shotgun", imagino por la función del copiloto en el cuerpo policial. Y bueno, terminamos llegando a la tumba donde había un buen número de pequeños objetos curiosos como, creo recordar, un sapito de plástico y una llave plateada. Perdonad la batallita pero me ha asaltado la nostagia, debió de ser hace más de 20 años, qué viejuno estoy.
Pues mirando sobre esto he visto que el año pasado salió una novela de Nick Mamatas llamada justamente así:
Por lo visto va de un crimen que tiene lugar durante una convención lovecraftiana.
Saludos,
Entro
Pues mirando sobre esto he visto que el año pasado salió una novela de Nick Mamatas llamada justamente así:
Por lo visto va de un crimen que tiene lugar durante una convención lovecraftiana.
Saludos,
Entro
¡¡¡Qué bueno!!! Precisamente voy a montar una partidilla por aquí que tiene ese punto de partida, y no digo más (no es original mía, sino una aventura de Jim Phillips). Muchas gracias por la referencia.
Yo siempre había creído que se refería a la localidad (aunque la verdad, no tenía ni idea del motivo). Sería interesante contrastar la referencia que sugiere Entro; acaso no tendría su puntito que así fuera, y que el autor se despidiera con un epitafio de lectura doble, o quizás triple, tratándose del padre de una cosmogonía. Ahora hasta me he liado .
Yo creo también que lo más seguro es que sea un epitafio polisémico, por llamarlo de alguna manera...
En cualquier caso todo lo precedente era relleno para poder fardar con un mínimo de excusa de que un servidor fue a visitar al maestro, llegó al cementerio cuando ya habían cerrado y tuvo que superar una tirada Hard de Persuade, con la posterior sorpresa de que el guardia de turno era un fan de Lovecraft y nos dejó entrar destranquis. De hecho nos llevó en su coche hasta el sitio, que estaba un pelín lejos. También tuvimos el sustito de que el hombre, al que apenas entendíamos, empezó a hablar de escopetas con un humor bastante inquietante, hasta que entendimos que nos invitaba a sentarnos en el asiento de copiloto, al que los americanos al parecer llaman "shotgun", imagino por la función del copiloto en el cuerpo policial. Y bueno, terminamos llegando a la tumba donde había un buen número de pequeños objetos curiosos como, creo recordar, un sapito de plástico y una llave plateada. Perdonad la batallita pero me ha asaltado la nostagia, debió de ser hace más de 20 años, qué viejuno estoy.
Al contrario, gracias por la historia, me hace también recordar ...
Lesser, qué buena historia.
Una pena que no hubiera sido ahora, con espíritu Legendoide, para disparar al guarda y saquear la tumba..
Si, Lesser, vaya historia más guapa.
Sobre gustos no hay nada escrito, pero que feos me parecen. El único que se salva es el de Chuntu.
Ya sabéis que yo tengo el sentido del buen gusto atrofiado, ¡pero aún no los tengo y ya no puedo vivir sin ellos!
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