Pág. 33/53 |
Los relatos de coña, personalmente, me parecen imprescindibles. No sólo son una perspectiva novedosa del género, sino que aportan un más que saludable refresco.
A mí los "territoriales" como que no me hacen mucha gracia...
Saludos,
Entro
¿Territoriales? no lo entiendo.
Entro se refiere a A la andaluza o a A la gallega, creo.
Ahhh...
By the way, estoy reescribiendo mi primer micro porque es un withouth God que escribí sin mucha atención y ya voy por las seiscientas y pico palabrejas. Me parece que si continúo así acabará siendo enviado al Calabazas.
JUÁjuájuá...! .
g.
A mí los "territoriales" como que no me hacen mucha gracia...
Saludos,
Entro
Si lo prefieres los suprimimos, por mi parte no hay problema.
Sí Misne, el título del Carpintero de Las Vegas iba en serio, o sea era una premisa cómica intencionada para dar título al relato, sí.
¿Y el de "no servimos libros a Dunwich" tiene título? Es que en tu blog parece que sí...
By the way, estoy reescribiendo mi primer micro porque es un withouth God que escribí sin mucha atención y ya voy por las seiscientas y pico palabrejas. Me parece que si continúo así acabará siendo enviado al Calabazas.
...lo cual no quita que el que escribiste entre tal cual está en los micros, si quieres. No pasa nada si te sirve de inspiración para uno más largo. Tú mismo, ya dirás. Hay tiempo
Saludos,
Misne
Si lo prefieres los suprimimos, por mi parte no hay problema.
Por lo menos el de Valencia no lo veo muy apropiado, no es una cosa típicamente valenciana. Si aún hicierais uno con las fallas...
Saludos,
Entro
Misne, llevas tanta razón que sabes cosas de las que ni yo mismo me acordaba. ¡Que chica tan observadora!
Es cierto, en el blog le puse este título
La primera persona se encontró cara a cara con el hermano de Wilbur
Para diferenciarlo del resto de textos.
pero ya ni me acordaba. Estoy acarajoteishon.
Podemos usarlo también para la antología
Por cierto, ¿habéis decidido ya si se permite la opción de aparecer con un nombre distinto del nick del foro? (lo pregunto por si me podéis incluir como R.R.López)
Micro dominical para ir cerrando mi participación en esta convocatoria.
_______________
The Call
A finales del verano de 1926, Howard Phillips Lovecraft atravesaba una mala época. No sólo seguía acuciado por sus sempiternas dificultades económicas, sino que su obra literaria, a la que había decidido encomendarse en cuerpo y alma, no levantaba el vuelo.
Sí, había logrado publicar varios relatos en los últimos números de la popular revista Weird Tales, pero no habían despertado un gran interés por parte de público y crítica, aparte de los jóvenes admiradores que solían escribirle largas misivas. Y Lovecraft sólo podía culparse a sí mismo. Había de reconocer que dentro de aquel mercado tan competitivo, los títulos de sus obras no llamaban la atención.
Reflexionó sobre lo ocurrido con su relato llamado The Moon-Bog, que había aparecido en el número de junio, varios años después de haberlo escrito para una convención de periodistas aficionados. Según le contaban, los lectores habían creído que se trataba de la segunda parte de otro cuentecillo, infame y por supuesto ajeno a él, llamado The Swamp Horror y publicado en esa misma revista dos meses antes.
Peor era el caso de The Outsider, aparecido en el número de abril justo a continuación de otro llamado Out of the Mists of Time, de un tal Benton Frazier. Un título, por cierto, que parecía sacado de sus propias obras de mayor envergadura y que volvía a demostrarle su falta de originalidad. Y ya le entraban ganas de morderse los puños si pensaba en el último, He, que acababa de salir en el número de septiembre. ¡"He", nada menos! ¿Pero cómo se le podía haber ocurrido ponerle un título tan insulso, que se perdía en el maremágnum de historias con nombres rimbombantes?
No, se dijo. Nunca más. En su escritorio descansaba el manuscrito de su última obra, a la espera de que le diera un repaso final y la mecanografiara. En un principio había pensado llamarla simplemente The Call, pero no volvería a afrontar la humillación de lo ordinario. Decidió cambiar el nombre de la criatura alrededor de la cual giraba la trama e incorporarla al título. Y menudo nombre le iba a dar: el más complejo, extraño y retorcido que se le podría haber ocurrido. Hasta sería complicado escribirlo, por no hablar de su imposible pronunciación. Pero nadie podría decirle que resultaba anodino. Al menos podía estar seguro de que nada más, en los siglos venideros, tendría en su título la palabra "Cthulhu".
_______________
Saludos,
Entro
Pág. 33/53 |