Spoiler. 
Yo la conocía como Alaska Nebraska, aunque desconocía su supuesta faceta Lovecraftaina... Debía de haberlo supuesto al ver sus ojos saltones.
Clarísima pinta de Innsmouth.
Caviar del hacendado, entonces.
Espero que no... 
La verdad es que el nombre del protagonista me provoca un poquito de rechazo...
¿Se sabe algo de la trayectoria del autor? Yo es que de Máscaras de Carcosa salí muy trasquilado... 
Vaya, qué pena. 
La colección Nova me sumergió de lleno en la lectura de ciencia-ficción, un dos o tres libros después de empezar a bucear en ella, dí con aquel ensayo sobre el género que escribió Barceló para la propia colección (edito: la guía de lectura).
Una gran pérdida para el panorama literario y editorial, sin duda.
¿Qué sentido tendría dar esa sorpresa? 
Yo no diría tanto, pero sí está claro que ahora la gente tiene herramientas para ser selectiva en el modo en que consume su ocio ocupador de espacio. Eso de comprar un libro para leerlo una vez y mandarlo a la estantería nunca ha salido a cuenta, y ahora que tenemos viviendas cada vez más pequeñas, resulta que la herramienta para que la estantería ocupe poco más de dos pliegos también está puesta a punto.
Desde luego la situación no invita al optimismo; yo veo a diario situaciones en mi trabajo que son para echarse a temblar.