¡Que viene el lobo!

Saludos.

Volvemos a la cuestión central: ¿qué o quién mató a ese centenar de personas?

Además de la hipótesis obvia, la del hombre-lobo, existen otras.

Un bloque de ellas podría denominarse "faunístico". Por un lado, podría tratarse de un animal exótico. La importación de especies foráneas en el XVIII era más común de lo que generalmente se cree. Huidos o abandonados por sus dueños al hacerse viejos y agresivos (caso general en los félidos) o por resultar cara su manutención, estos animales se asilvestraban y en un medio hostil atacaban a la víctima más fácil, el hombre.

En Lizarza, un pueblo entre Navarra y Guipúzcoa, fueron cazados leopardos en 1777, 1781 y 1820. En las Vascongadas constan tigres abatidos en Ordicia (1608) y en Idiazábal (1766).

¿Pudo tratarse de un león, un tigre o, mejor, un lobo marsupial (depredador birrioso donde los haya), de un licaón, de una hiena... ? Las descripciones del monstruo no concuerdan con ninguna de estas especies pero tampoco entre sí.

Se ha hablado también de "paleofauna": un descendiente de los “lobos-hiena” prehistóricos o de otros depredadores de la época glaciar (generalmente de más porte que los actuales). Pero esa hipótesis sí que no se sostiene. ¿A quien devoraron sus progenitores?

¿Una mutación quizá en un lobo? ¿Una alteración en su comportamiento que le llevó a ataques compulsivos a humanos? Ese último caso ha sido frecuente en depredadores africanos o asiáticos.

Lo cierto es que las explicaciones faunísticas parecen poco convincentes, así que veamos otras opciones...

¿Se conserva la osamenta o se perdió tras la revolución francesa?

Saludos,

Entro

Debe haber aún algunos huesos que se le atribuyen, pero parece que no se trata siguiera de huesos de cánido, así que por ahí poco se podrá aclarar. No es de extrañar, considerando que por el mundo hay medio centenar de falos de Rasputín en tarros pasando de mano en mano.

Antes de pasar a otras hipótesis, algunos datos más sobre la faunística. Al animal que más muertes se le atribuyen, además del hombre, es a un felino antropófago, el "tigre de Benchipur", al que se le adjudican 127 víctimas mortales hasta que un "cazador blanco" acabó con él.

Esto en el XIX. Ya en el XX en la llanura de Rwindi-Rutshuru, en el Congo Belga, así como en Uganda y Kenia se produjeron ataques masivos de leones contra personas (curiosamente hay regiones de África donde no se dan acometidas de los leones, como el sur de Sudán. Supongo que no se atreven a enfrentarse a los musculosos nubas). Estas razzias se daban cuando los felinos se quedaban sin sus presas habituales, generalmente de resultas de la intervención europea (hay una película que trata de estos hechos, basada en una historia real acontecida en Kenia cuando se construía el ferrocarril, creo que se titula "Los señores de la noche").

En este contexto africano hay leones a los que se atribuye un record por encima de las 127 almas del tigre de Ranchipur. Pero es que, y con esto entramos en el segundo bloque de hipótesis, esos ataques se produjeron en regiones donde campaba la secta de los visanguka, los "hombres-león".

Por cierto... aunque quizás no venga de todo al caso...cosa curiosa.

Manuel era Manuela, mañana durante el café deslumbro a la oficina, por llamarlo de alguna manera.

Pero este sacaúntos es anterior (por poco) al sacamantecas vasco del que habló Buscaglia.

Saludos,

Entro

¡Que copióoooooon!

¡Estáis hablando de un lobo-some, no de un "sacamantecas"! Es más, de un licántropo de solera con dos películas, interpretadas por José Luis López-Vázquez y creo que Julian Sands (¿no es el actor que interpreta Warloch I y II, con las andanzas de un brujo del XVII especialmente sangriento?

Pasamos a otro bloque de explicaciones, más humanas.

¿Se trataba de algún tipo de secta asesina que ocultaba sus acciones tras la máscara del lobo?

Lo cierto es que, en la Historia de la humanidad, hay otros ejemplos. Todavía a comienzos del siglo XX en el África Central, Zaire, Angola y la región de los Grandes Lagos actuaba la secta de los visanguka, los "hombres-león". Esta cofradía de asesinos a sueldo actuaba por la noche. Primero simulaban la presencia de un león imitando su rugido con una calabaza medio llena de agua. Posteriormente, cuando los vecinos se habían encerrado en sus chozas, cortaban la pared de la cabaña y mataban a su víctima, lacerando el cuerpo con garras metálicas para simular el ataque del animal.

Las potencias coloniales terminaron con sus actividades de forma expeditiva: colgaron a los sospechosos, arrasaron sus aldeas y deportaron a sus vecinos. Para 1950 la secta se consideraba totalmente desmantelada.

Estos "hombres-león" eran, básicamente, asesinos a sueldo. En otros casos, la actividad homicida tenía un carácter puramente mágico, dentro de la concepción animista. Entre 1933 y 1934 la administración colonial belga investigó varios centenares de muertos entre Stanleyville y Uganda. Todos presentaban surcos en sus cuellos partidos. Se descubrió que eran víctima de la secta de los "hombres-pantera". Según informe de la UNESCO de 1953, esta sociedad mágica actuó en 16 de los actuales estados africanos. Su actividad implicaba el asesinato y posterior antropofagia en una marmita mágica.

¿Podría haber algo similar detrás de la actuación de la bestia de Gévaudan?

A mi entender, no. Nuestro ámbito cultural, aunque también brutal, no me parece adecuado para generar una secta de este tipo. Pero sí para otro tipo de asesinatos en serie...

Genial, Buscaglia.... estás procurando mucho material e ideas para futuras partidas...